Evaluación educativa - Santos Guerra

En la escuela se evalúa con mucha frecuencia pero apenas se cambia. De la manera que está diseñada la evaluación, los alumnos se preocupan simplemente por saber sobre qué van a ser evaluados y cómo para regirse a ello. Así que no aprenden, no disfrutan, no interactúan, solo memorizan una serie de conceptos que apenas entienden para olvidarlos a los dos días.

La evaluación, según este capítulo de Santos Guerra, se define como "sistemática investigación del valor o mérito de algún objeto", pero entonces... ¿no se pueden aprender otras cosas?, ¿tenemos en cuenta lo que el alumno quiere aprender? En la escuela se evalúa para conocer resultados, no es importante la evolución del alumno, si realmente a aprendido algo o si está motivado e interesado.

Miguel Ángel Santos Guerra

La evaluación condiciona la dinámica del aula, no oímos "he aprendido poco", sino "he suspendido". Muchos alumnos y alumnas aseguran que no hay que estudiar si no hay un control o un examen. El profesor debe comprobar el rendimiento de sus métodos, si tienen relación con el aprendizaje del alumno porque es esto lo que buscamos evaluar, no su capacidad de memorización.

Hay otro factor que afecta a los procesos de evaluación del aprendizaje, me refiero a el elevado número de las ratios, si éstas fueran más bajas, posiblemente podríamos hacer un seguimiento más individualizado de nuestros alumnos y así conocer lo que les interesa aprender y lo que van aprendiendo. Sin embargo, debemos adaptarnos a las ratios que tenemos y buscar metodologías que nos permitan trabajar con este número de alumnos de manera organizada. Por ejemplo, podemos trabajar en grupos interactivos en los que los niños y niñas se ayudan entre ellos, de manera que lo que uno no conoce, otro sí y así es como van descubriendo nuevos conocimientos. En este aula nosotros, los maestros y maestras, seríamos guías supervisores que vamos apoyando, pero que no nos dedicamos a dar una clase magistral en la que nuestros alumnos no son participantes.

A la hora de evaluar, podemos llevar a cabo procesos como la autoevaluación o la coevaluación, de manera que nuestros alumnos se sientan parte del proceso enseñanza/aprendizaje y sepan que su opinión es tenida en cuenta y es importante, que vale tanto como puede valer la del maestro o la maestra.

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